¿Paula Chaves, la novia de Peter? ¿Peter, es Peter sin Paula? El binomio Paula-Peter ya tiene más de un año y lo asombroso es que en el mundo televisivo ya se los identifica así, con el nombre de pila, sin apellidos. Se conocieron en “ShowMatch”, Paula bailaba y Peter, productor del ciclo, se enamoró perdidamente. O al menos eso decía Tinelli. El juego de seducción duró un tiempo durante el cual los números del rating fueron subiendo. Más treparon cuando se confirmó el noviazgo y el resto... es historia más fresca. La pareja participa en el “Bailando 2012” (bailan juntos), los sábados protagonizan “Concubinos”, una ficción dentro del ciclo “La cocina del show” (El Trece) y el verano pasado en Carlos Paz protagonizaron “Despedida de soltero”, una obra de teatro que ayer estrenaron en la calle Corrientes.
Paula habla rápido, ansiosa por contar el éxito y la felicidad que está viviendo. “Es fuerte ver las marquesinas nuestras en la calle Corrientes, es la primera vez que nos pasa”, admite.
La comedia trata sobre los desencuentros y confusiones de Peter y Paula en la previa a la boda. Malentendidos, enredos y confusiones llevan la situación a límites disparatados y hacen peligrar el tan esperado casamiento de Peter y Paula. “Mi personaje es una Paula potenciada, es como un absurdo de mi personalidad, más histérica, nerviosa y celosa de lo que soy”, explica.
¿Cómo llevás esto de hacer todo con Peter? Bailar por un sueño, la obra, “Concubinos”...
_Al principio me daba un poco de miedo, la verdad es que no quería estar en este “Bailando”, me parecía que tenía que cuidar la pareja. Tenía miedo de caer en la rutina, pero al final nada que ver, nos divertimos un montón. Tampoco estamos todo el tiempo juntos, ni siquiera cuando trabajamos, intentamos cuidar nuestros propios espacios.
¿Entonces no se cansan de estar tan encimados?
_Pedro me dijo: ‘Mira Pau, no hay una fórmula para ser feliz’, y es cierto, las parejas perfectas no existen. Hoy nos toca trabajar juntos... mañana se verá.
¿Verdad? ¿Ficción? ¿Parte del show? Lo cierto es que el público compró este dúo y Paula tiene la explicación: “La gente se enganchó porque nuestra historia es real, común y corriente, y la ve plasmada en la televisión”.
¿Y cómo era tu vida hace cuatro años? ¿Imaginabas que algo de esto podría pasarte?
_No, pero lo deseaba. Hace cuatro años estaba trabajando como modelo, intentando incursionar en el mundo de la actuación con una participación en “Impostores” (FX) y en “Niní” (Telefé). Quería estar en el “Bailando” pero la verdad es que yo no era un personaje rico a nivel prensa ni popularidad, mi representante logró que me aceptaran y ahí se empezó a dar todo de una forma mágica. La popularidad que adquirí ahí es increíble gracias a la generosidad de Tinelli.
¿Te molesta cuando se duda de la veracidad de tu relación con Peter?
_Hay algo que aprendí de Marcelo, él lo dice siempre: ¿Para qué detenerse con un comentario malo si hay diez buenos? Decían que lo mío con Pedro es mentira, que me importan los chicos con más plata y poder, y yo, siendo auténtica, pude derribar lo que se decía de mí. Porque yo soy así, como ven, jamás hice un personaje. No podría sostenerlo.
Paula habla rápido, ansiosa por contar el éxito y la felicidad que está viviendo. “Es fuerte ver las marquesinas nuestras en la calle Corrientes, es la primera vez que nos pasa”, admite.
La comedia trata sobre los desencuentros y confusiones de Peter y Paula en la previa a la boda. Malentendidos, enredos y confusiones llevan la situación a límites disparatados y hacen peligrar el tan esperado casamiento de Peter y Paula. “Mi personaje es una Paula potenciada, es como un absurdo de mi personalidad, más histérica, nerviosa y celosa de lo que soy”, explica.
¿Cómo llevás esto de hacer todo con Peter? Bailar por un sueño, la obra, “Concubinos”...
_Al principio me daba un poco de miedo, la verdad es que no quería estar en este “Bailando”, me parecía que tenía que cuidar la pareja. Tenía miedo de caer en la rutina, pero al final nada que ver, nos divertimos un montón. Tampoco estamos todo el tiempo juntos, ni siquiera cuando trabajamos, intentamos cuidar nuestros propios espacios.
¿Entonces no se cansan de estar tan encimados?
_Pedro me dijo: ‘Mira Pau, no hay una fórmula para ser feliz’, y es cierto, las parejas perfectas no existen. Hoy nos toca trabajar juntos... mañana se verá.
¿Verdad? ¿Ficción? ¿Parte del show? Lo cierto es que el público compró este dúo y Paula tiene la explicación: “La gente se enganchó porque nuestra historia es real, común y corriente, y la ve plasmada en la televisión”.
¿Y cómo era tu vida hace cuatro años? ¿Imaginabas que algo de esto podría pasarte?
_No, pero lo deseaba. Hace cuatro años estaba trabajando como modelo, intentando incursionar en el mundo de la actuación con una participación en “Impostores” (FX) y en “Niní” (Telefé). Quería estar en el “Bailando” pero la verdad es que yo no era un personaje rico a nivel prensa ni popularidad, mi representante logró que me aceptaran y ahí se empezó a dar todo de una forma mágica. La popularidad que adquirí ahí es increíble gracias a la generosidad de Tinelli.
¿Te molesta cuando se duda de la veracidad de tu relación con Peter?
_Hay algo que aprendí de Marcelo, él lo dice siempre: ¿Para qué detenerse con un comentario malo si hay diez buenos? Decían que lo mío con Pedro es mentira, que me importan los chicos con más plata y poder, y yo, siendo auténtica, pude derribar lo que se decía de mí. Porque yo soy así, como ven, jamás hice un personaje. No podría sostenerlo.
